En un Congreso Normalizador que carece de validez legal
Reelegido por una CGT debilitada, Moyano criticó duro al gobierno
Tras ser proclamado por un centenar de gremios, en su mayoría pequeños, llamó a “repensar” el voto de los trabajadores de cara a las elecciones de 2013. Lo secundará el petrolero Guillermo Pereyra, director en YPF.

Viernes, 13 de julio de 2012
General del Trabajo (CGT), Hugo Moyano, renovó su mandato por otros cuatro años al frente de la central obrera, a través de un Congreso Normalizador, convocado por los gremios que aún le responden, y que previamente había sido declarado ilegal por el Ministerio de Trabajo. Con la elección consumada, Moyano brindó un discurso donde reiteró las “presiones” del gobierno para alejar a gremios de su lado y pidió “cambiar el voto” si no se atienden los reclamos de los trabajadores.
La actividad en el microestadio del club Ferrocarril Oeste comenzó apenas pasadas las 9 de la mañana, a través de un Congreso Extraordinario en el que, entre otros puntos del orden del día, se formalizó el ingreso de 47 organizaciones sindicales a la CGT. Luego, durante el Congreso Ordinario –que sesionó invocando la figura de Juan Manuel Palacios, dirigente de la UTA fallecido en un accidente de tránsito en 2011– los delegados reeligieron a Hugo Moyano para un tercer período consecutivo, en medio de un estricto operativo de seguridad.
Según datos brindados por los organizadores, la lista Azul encabezada por Hugo Moyano recibió 1009 votos sobre un total de 1013 congresales (hubo 4 votos en blanco). Si se tiene en cuenta que había 1851 dirigentes sindicales habilitados para asistir, el quórum obtenido por el moyanismo alcanza al 54% del padrón, “lo que ratifica la legalidad y legitimidad de la convocatoria”, se apresuró a afirmar Hugo Moyano.
El titular del sindicato de Petróleo y Gas Privado de Neuquén, Río Negro y La Pampa, Guillermo Pereyra, será el secretario adjunto de la CGT liderada por Moyano. De buena relación con el gobierno tras la recuperación de YPF, Pereyra fue nombrado representante gremial de los trabajadores en el directorio de la petrolera. En tanto, el titular de la UATRE (peones rurales), Gerónimo Venegas, estará al frente de la Secretaría del Interior, el municipal Amadeo Genta ocupará la Secretaría de Finanzas y Juan Carlos Schmid, de Dragado y Balizamiento, se hará cargo de la Secretaría de Relaciones Internacionales.
El resto del Consejo Directivo se reparte entre algunos de los aliados más cercanos al líder camionero. Así, Julio Piumato (Judiciales) seguirá al frente de la Secretaría de Derechos Humanos y el diputado nacional Omar Plaini (Canillitas) hará lo propio en la Secretaría de Prensa, en tanto que el diputado nacional Facundo Moyano (Peajes) ocupará la Secretaría de la Juventud, y el bancario Sergio Palazzo fue designado al frente de la Secretaría de Relaciones Institucionales.
Fuentes cercanas al moyanismo aseguraron que el Congreso Normalizador contó con la participación de representantes pertenecientes a 106 organizaciones sindicales, incluidos los 47 gremios que fueron admitidos como nuevos confederados por el Congreso Extraordinario. Entre las organizaciones que integrarán la CGT moyanista se cuentan la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) –su titular Jorge Pérez Tamayo ocupará un cargo como vocal en el Consejo Directivo–, los recibidores de granos nucleados en URGARA, curtidores, panaderos, trabajadores del espectáculo público y la seccional capital de peones de taxis dirigida por José Ibarra. Finalmente, el gremio textil que conduce Jorge Lobais no envió delegados, y lo propio hizo la Unión Ferroviaria.
Es decir, al margen de la poderosa estructura de un gremio como el de Camioneros, el respaldo a la candidatura de Moyano provino de agrupaciones de mediano y pequeño tamaño. Las organizaciones de mayor peso por su número de afiliados pertenecen en su mayoría al bloque que impulsa la candidatura del metalúrgico Antonio Caló, tal es el caso de SMATA, Comercio, Luz y Fuerza y Sanidad, entre otros, quienes elegirán autoridades a través de un Congreso propio el próximo 3 de octubre.
El Ministerio de Trabajo dictaminó el viernes de la semana pasada que el proceso electoral impulsado por el moyanismo era nulo en tanto había incurrido en una serie de irregularidades violatorias de los estatutos de la CGT. La decisión de la cartera laboral se originó en un pedido de impugnación efectuado por un conjunto de dirigentes opositores, entre los que se encuentran Ricardo Pignanelli (SMATA), Julio Ieraci (Luz y Fuerza) y Carlos West Ocampo (Sanidad), quienes argumentaban que Moyano no reunió el quórum necesario en la reunión de Consejo Directivo del 24 de abril, donde puso en marcha su cronograma electoral. El moyanismo ya adelantó que apelará la decisión en la justicia.
Con la división ya consolidada al interior de la CGT, coexistirán tres centrales obreras: la comandada por Moyano, la que elegirá a Antonio Caló en octubre y la Azul y Blanca que dirige el gastronómico Luis Barrionuevo y que contiene a unas 40 organizaciones de reducido tamaño.
Apenas finalizada la elección, Hugo Moyano se dirigió hacia el escenario montado sobre el campo de juego de Ferro y en un breve discurso repartió duras críticas al gobierno. Tal como viene reiterando en las últimas semanas, Moyano insistió en los “aprietes” y “todo tipo de presiones” efectuadas desde el gobierno para que las organizaciones sindicales no asistan a la reelección del camionero.
“A ningún funcionario le tememos, a ningún multimedios le tememos”, aseguró el dirigente, en medio de una amplia convocatoria, casi en su totalidad perteneciente a Camioneros. Y en uno de los pasajes de mayor virulencia, instó a los trabajadores a rever el voto otorgado a la presidenta Cristina Fernández en las elecciones presidenciales del año pasado. “Que el gobierno no se olvide que mucho de ese 54% que muestran es de ustedes, los trabajadores. Y si no compañeros, comencemos a pensar en términos políticos, si no hay respuesta a quienes han contribuido al triunfo, tendremos que repensar el futuro voto que tendríamos que hacer el año que viene”, fustigó Moyano. Y agregó: “No podemos votar a quien desprecie a los trabajadores a quienes nos nieguen.”
Al referirse a la conformación del nuevo Consejo Directivo, Moyano aseguró que “es pluralista y contiene a gremios grandes y pequeños como a hombres que piensan distinto, pero siempre es mucho más importante una gran organización que una organización grande.”
“No hay que ofrecerle respuestas a Moyano sino a los trabajadores”, afirmó el dirigente, quien adelantó que si ello no ocurre “el año próximo habrá que repensar políticamente el voto”.
Moyano convocó también a "la unidad del movimiento obrero"; indicó que cuando "no hay diálogo es porque no existen argumentos"; afirmó que "no es posible atacar al sindicalismo organizado", y negó que la CGT sea "destituyente o golpista".
"Nadie peleó y cuidó mejor a la democracia que los trabajadores. El nuevo consejo directivo dialogará con todos los sectores de la sociedad", concluyó el dirigente camionero.
Por su parte, el titular del gremio Judicial, Julio Piumato concluyó que “la autonomía de las organizaciones sindicales fue algo que la central obrera respetó en estos ocho años", y consideró que la elección de Moyano en Ferro es “el proceso de renovación de autoridades más transparente y democrático en la vida de la CGT”.
Fuente: Tiempo argentino