El fuerte temporal registrado en las últimas horas en la provincia del Chaco dejó a su paso severos daños materiales, familias afectadas y complicaciones en distintos puntos del territorio. Así lo confirmó el ministro de Desarrollo Humano, Diego Gutiérrez, quien brindó detalles de la situación en declaraciones a CIUDAD TV y explicó las acciones que se encuentran en marcha para asistir a los damnificados.Estamos atravesando situaciones muy difíciles y muy tristes. Ayer estuvimos junto a muchas familias que lo han perdido todo, incluso con voladuras de techos”, señaló el funcionario, quien remarcó que el trabajo se realiza de manera articulada con el municipio de Resistencia y distintas áreas del Gobierno provincial.

Según precisó, las zonas más afectadas durante la jornada del domingo fueron el Área Metropolitana del Gran Resistencia y algunas localidades del interior como Colonia Cotelay y la Isla del Cerrito, donde se registraron milimetrajes de lluvia fuera de lo normal. Gutiérrez advirtió además que el pronóstico anticipa la continuidad de las lluvias, al menos hasta las primeras horas de la tarde, con posibilidad de nuevas precipitaciones en los próximos días.

Uno de los principales problemas derivados del temporal fue la caída de árboles y los cortes de energía eléctrica. En Resistencia se registró la caída de más de 70 árboles, lo que provocó daños en líneas eléctricas. Para atender esta situación, trabajaron al menos 12 cuadrillas de Secheep en el área metropolitana y también en zonas rurales. “Hubo barrios que estuvieron muchas horas sin luz, lo entendemos, pero el personal trabajó en condiciones muy difíciles y la mayoría de los servicios se fue restableciendo hacia la noche”, indicó.

En paralelo, el Ministerio de Desarrollo Humano avanzó con la asistencia directa a las familias afectadas, priorizando los casos más graves, como las voladuras de techos. El funcionario explicó que se realizaron relevamientos y se ofrecieron centros de evacuación y albergues transitorios, tanto provinciales como municipales, para garantizar condiciones dignas, con abrigo, comida y un lugar seguro.

Si bien algunas familias aceptaron ser evacuadas, Gutiérrez reconoció que la mayoría optó por permanecer en sus viviendas por temor a robos. “Entendemos esa preocupación, pero en situaciones extremas recomendamos evacuar. Lo material se puede recuperar, una vida humana no”, remarcó.

En el interior provincial, la situación también es monitoreada de manera permanente. En Quitilipi, por ejemplo, se registraron más de 120 milímetros de lluvia y complicaciones en barrios ubicados en zonas bajas. El ministro señaló que existen sectores donde el agua no logra escurrir debido a asentamientos en áreas que naturalmente funcionan como lagunas, lo que agrava el impacto de las lluvias intensas.

Ante cualquier emergencia, Gutiérrez recordó que se encuentran habilitadas líneas de contacto difundidas por el Gobierno provincial y que el equipo de asistencia responde de manera inmediata ante cada aviso. Asimismo, no descartó la colaboración del Ejército si la situación lo requiere.

Finalmente, el ministro pidió a la población extremar las precauciones, evitar salir de sus casas y aceptar la evacuación en caso de riesgo. “Estamos en alerta permanente, con todo el personal a disposición. El objetivo es acompañar a las familias y atravesar esta emergencia de la mejor manera posible, especialmente en la previa de Nochebuena y Navidad”, concluyó.