Cumbre bilateral anual en Washington Ante líderes europeos, Obama volvió a reclamar "decisión" y "voluntad política" para resolver la crisis El mandatario de EEUU recibió en la Casa Blanca al presidente del Consejo Europeo, Herman van Rompuy y a su par de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso. Aseguró que su país "está listo" para ayudar a la Unión Europea.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, pidió una vez más "decisión" y "voluntad política" a la Unión Europea para resolver la crisis de la eurozona, en el marco de la cumbre bilateral anual en Washington de la que sin embargo no salió ningún compromiso concreto para hallar una salida.
Obama recibió en la Casa Blanca al presidente del Consejo Europeo, Herman van Rompuy, a su par de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, y a la jefa de la diplomacia de la UE, Catherine Ashton. El mandatario estadounidense estuvo acompañado a su vez por la secretaria de Estado, Hillary Clinton, y su jefe del Tesoro, Timothy Geithner, entre otros altos funcionarios.
El encuentro, de unas dos horas, fue realizado a puertas cerradas y con un muy limitado acceso a la prensa.
Al término del mismo, Obama aseguró que su país "está listo" para ayudar a Europa a resolver su crisis de deuda trabajando de "forma constructiva" con el viejo continente.
Previamente su portavoz, Jay Carney, había especificado sin embargo que Washington está dispuesto a dar "consejos" a Europa, pero no ayuda financiera, y que lo principal es que Obama considera que Europa debe actuar con "decisión" y, sobre todo, "voluntad política".
"El presidente comprende los desafíos políticos y de fondo que hay, pero cree que éste es un momento que requiere de una acción decisiva, así como voluntad política y los recursos financieros necesarios", dijo Carney.
"Estados Unidos cree que Europa tiene que realizar una acción decisiva, concluyente, para manejar este problema y que tiene la capacidad para hacerlo", agregó.
Van Rompuy por su parte aseguró en una comparecencia conjunta tras la cumbre que la UE es conciente de que tiene que "hacer más" para atajar la crisis y adelantó que el 9 de diciembre presentará en la cumbre de la UE en Bruselas una "hoja de ruta" para delinear "cómo reforzar la unión económica de la eurozona de forma acorde con la unión monetaria".
Barroso por su parte manifestó su "total confianza" en que los líderes europeos podrán atajar la crisis.
"Europa está atravesando tiempos duros, sí, pero estamos decididos a superar las actuales dificultades", subrayó y señaló que, aunque la toma de decisiones "a veces lleve tiempo", la UE está ya "en esa dirección", adoptando "fuertes medidas para una situación sin precedentes".
En un comunicado conjunto emitido tras el encuentro, ambas partes reconocieron que la economía global se encuentra en una "nueva y difícil fase" desde su última cumbre en Lisboa el año pasado.
Sin embargo, más allá de subrayar su "compromiso" para salir de la crisis, en el documento consensuado no hay ningún anuncio llamativo de medidas concretas diferentes a las ya manejadas para resolver los problemas de ambos lados del Atlántico.
"Estamos comprometidos a trabajar juntos para revitalizar el crecimiento económico, crear trabajos y garantizar la estabilidad financiera", señala el comunicado, de 23 puntos.
De acuerdo con el documento oficial, Estados Unidos "saluda las acciones y determinación europeas para tomar todos los pasos necesarios para asegurar la estabilidad financiera de la eurozona y resolver la crisis".
De su lado, la UE dice esperar "una acción estadounidense en materia de consolidación fiscal a medio plazo", en referencia también al impasse político que vive Washington en sus esfuerzos, hasta ahora con pocos resultados, para reducir su elevadísimo déficit.
Tal como había adelantado ya Bruselas en los días previos a la cumbre en Washington, las dos partes acordaron hoy crear un "Grupo de Trabajo de Alto Nivel sobre Empleos y Crecimiento" que estará encabezado por el representante comercial de Estados Unidos, Ron Kirk, y la comisaria europea de Comercio, Karel De Gucht.
Este grupo deberá "identificar políticas y medidas para incrementar el comercio e inversiones UE-EEUU para apoyar la creación de empleo, el crecimiento económico y la competitividad internacional mutuamente beneficiosas".
El equipo deberá informar de sus avances en junio de 2012, con el objetivo de emitir un informe amplio con "conclusiones y recomendaciones" para fianles del año próximo.
Más allá de la crisis económica, los líderes de Estados Unidos y la UE debatieron hoy temas de política internacional, especialmente sobre la "primavera árabe" y Cercano Oriente.
En su comunicado conjunto, señalaron que los acontecimientos de los últimos meses en Egipto, Túnez y Libia constituyen una "oportunidad histórica" para lograr una "exitosa reforma democrática" en el mundo árabe y manifestaron su compromiso para "apoyar las transiciones democráticas en marcha".
A Siria la llamaron a "acabar de inmediato con la violencia, permitir el ingreso inmediato de observadores de derechos humanos y periodistas internacionales", así como que "permita una transición pacífica y democrática".
La cumbre conjunta también revisó la situación con Irán. Obama y los líderes de la UE abogaron por continuar por la vía de una "solución diplomática" el diferendo por el programa nuclear persa, si bien dejaron la puerta abierta a "medidas adicionales" en caso de que Teherán siga sin hacer caso a la comunidad internacional.
Fuente: Ambito.com
Martes, 29 de noviembre de 2011
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