Por La Paz Pañuelos bordados en rojo o verde para denunciar la violencia  Los pañuelos que bordan activistas mexicanos contra la violencia de ese país son todos blancos y del mismo tamaño, y son bordados en rojo si cuentan un asesinato, y en verde si lo que se denuncia es una desaparición. Más allá de este código por colores, el pañuelo de por sí ya tiene una enorme carga simbólica, pues remite a las lágrimas, a despedidas pero también invita a la tregua, al diálogo.
Es imposible no relacionarlos con los pañuelos de las Madres de Plaza de Mayo, bordados con el nombre de sus hijos desaparecidos.
Actualmente hay grupos activos de bordadores por la paz en México, Inglaterra, Canadá, Puerto Rico España, Italia, Francia, Japón, Guatemala, EE.UU., Perú, Honduras y Chipre. En Argentina, el único grupo es el cordobés.
Según un informe presentado en diciembre pasado por la ONG italiana Líbera, entre 2006 y 2012 se produjeron unas 30.000 desapariciones y 136.000 personas fueron asesinadas en México, de las cuales 116.000 murieron como consecuencia de la guerra contra el narcotráfico durante el gobierno de Felipe Calderón.
Si bordar un pañuelo lleva unas tres horas, en México basta que transcurran dos para que tenga lugar otro crimen violento. Afortunadamente esto es insuficiente para desanimar a los bordadores que no dejan de pedir por la paz, a fuerza de puntadas.
Domingo, 3 de febrero de 2013
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