Deportes El título que menos quería 
Con 17 trofeos sobre el lomo, con una lesión que le resultó insoportable, Sebastián Battaglia, el jugador con más títulos en la historia de Boca, anunció oficialmente que no jugará más a la pelota.
Por: Julián Iglesias
La peleó. De mil maneras distintas. Por más que todo le indicaba que el combate estaba perdido. Aunque cada pequeño paso adelante derivaba en dos hacia atrás, no se iba a dejar ganar. Como si fuera un mandato que partía desde su apellido mismo. Sebastián Battaglia dio batalla contra las lesiones durante casi tres años. Hasta que un día se cansó. Y el jugador con más títulos en la historia de Boca anunció su retiro del fútbol profesional, a los 32 años.
Desde hace un tiempo que en los pasillos de la Bombonera se mencionaba por lo bajo que ninguno de los distintos tratamientos a los que había sido sometido el mediocampista para intentar recuperarse de una osteocondritis en el tobillo había dado resultados y que no podría volver a jugar. Sin embargo, cuando el asunto se hizo público por primera vez, allá por octubre, el propio jugador aclaró que no pensaba rendirse. Pero, finalmente, el dolor que le produce la patología que padece (que consiste en el desgaste de los cartílagos que unen los huesos) pudo más. “He decidido terminar con mi carrera. El tobillo no respondió y no podía seguir jugando al fútbol. Es feo porque en mi caso es por lesión y no por la edad”, se lamentó Battaglia.
El santafesino debutó en Primera el 31 de mayo de 1998, en un 4-0 del Xeneize sobre Gimnasia y Tiro de Salta y, salvo por un paso de un año por Villarreal de España en 2004, siempre se vistió de azul y oro. Titular indiscutido a partir de 2000, Seba solamente se perdió de levantar una de las once Copas internacionales que ganó Boca desde el comienzo del Siglo XXI: la Sudamericana de 2004. “Me quedo con alguno de los goles que le marqué a River (NdeR: le hizo dos, en el Apertura 2003 y el Clausura 2008). Y los partidos con Santos en la Libertadores 2003 y la Intercontinental de ese año con Milan son los que tengo grabados en la cabeza”, recordó.
La única mancha para su carrera fueron las lesiones. De un tiempo a esta parte, Battaglia pasó más tiempo en recuperación que dentro del campo de juego: una rotura de ligamentos, una pubialgia que nunca terminaba de irse y una osteocondritis en la rodilla, antes de esta última dolencia, fueron minando las fuerzas del mediocampista. En los últimos cuatro años, apenas pudo disputar 22 partidos: 13 en la temporada 2009/10, 19 en la 2010/11 y sólo uno en la 2011/12.
Adentro de la cancha siempre pareció tener energía para un quite más, de esos que levantaban aplausos desde los cuatro costados de la Bombonera. Ese estadio que, sin saberlo por ese entonces, le brindó su último gran homenaje como jugador, el 11 de diciembre de 2011: ese día frente a All Boys, con el Xeneize ya campeón del Apertura, Seba ingresó a los 29 minutos del segundo tiempo y se llevó la merecida ovación de todos los hinchas. No estaba para jugar: no pisaba una cancha desde hacía nueve meses. Pero quería sentirse parte del título. El último de los 17 que consiguió con la azul y oro. El que terminó de convertirlo en leyenda.
Fuente:Infonews
Viernes, 5 de abril de 2013
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