San Lorenzo Pizzi le apuesta a un siete bravo  En la práctica de ayer, el DT del Ciclón probó con ese lote de jugadores que reservó para jugar la final.
Tras eliminar a Estudiantes de Buenos Aires en Chaco y pese a que en ese momento faltaban 28 días para la disputa de la final, en la mente de Juan Antonio Pizzi ya rondaba el equipo titular que iría por la consagración en la Copa Argentina. Los once que luego de asegurarse el match definitivo establecido en Catamarca jugaron tres partidos consecutivos, con dos triunfos y un empate, serán los mismos que mañana saldrán a la cancha para buscar el título y el pasaje para jugar el año próximo la Libertadores, que sin dudas es el torneo internacional que desvela a los hinchas Cuervos.
En la práctica matutina de ayer, el entrenador ensayó el táctico para jugarle a Arsenal y para dicho trabajo dispuso que los siete cambios para ir a Sarandí vuelvan a foja cero. Pizzi plantó el equipo que indudablemente es el preferido por sobre el resto y de esta forma, sin confirmarlo dispuso el entrenamiento con Sebastián Torrico; Julio Buffarini, Pablo Alvarado, Santiago Gentiletti, Emmanuel Mas; Juan Mercier, Néstor Ortigoza; Leandro Romagnoli, Ángel Correa, Ignacio Piatti; Gonzalo Verón. Estos once son los elegidos para conquistar un campeonato en el que el Ciclón fue alternando distintos planteles, aunque recién en la final jugará con lo mejor que tiene a mano.
Pese a la derrota del sábado por el Torneo Inicial ante el mismo rival de mañana y la victoria de Newell´s que lo alejó a seis unidades de San Lorenzo, hay confianza en el plantel que minutos después de las 10 tomará el vuelo hacia la provincia que cobijará la final. La convicción parte de las capacidades propias, a poder contar con todas las figuras (más allá de la lesión de hace más de un mes del goleador Martín Cauteruccio) y desde el cuerpo técnico instaron a minimizar la bronca por las decisiones arbitrales del sábado, que lo llevaron al Ciclón a jugar los últimos 25 minutos con dos hombres menos. En ese sentido, Leandro Romagnoli sostuvo: “Delfino da tranquilidad, es de los más parejos y tiene trayectoria”, en alusión al árbitro que dirigirá en Catamarca la final.
La idea desde el entorno de Pizzi es capitalizar el enojo para que sea utilizado a favor, nada más ni nada menos que en la final que le permitirá alzar un trofeo después de seis años y entre más de 224 equipos que participaron para llevarse los 9 kilos de aluminio y 45 centímetros de altura.
Fuente. elgrafico
Martes, 15 de octubre de 2013
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