Salud Tendencia: cada vez más gente se toma tiempo del trabajo para nadar 
Pocos conocen los beneficios de dedicarle menos de una hora de ejercicio a su cuerpo. En las oficinas se convirtió en algo común.
Tomarse un recreo en el medio de la jornada laboral para hacer deporte es una tendencia a la que cada vez más argentinos recurren para entrenarse y distenderse. De hecho, es poca la población que conoce los beneficios de tan sólo treinta minutos de ejercicio al día.
La pileta en el horario del almuerzo acerca cada vez más a empleados que buscan en la natación un momento para relajarse, o bien, la oportunidad de ejercitarse para bajar de peso ya que la natación conlleva un gasto calórico mayor que caminar por unidad de tiempo y, además, mueve más grupos musculares, generando mucho gasto de energía.
Las personas que practican natación al mediodía dicen que después de nadar les alcanza un almuerzo liviano para seguir trabajando a la tarde. Para otros el horario ideal es después de trabajar y antes de ir a casa, ya que si entran en su hogar, les cuesta mucho salir de nuevo. Esto les permite llegar a su casa de buen humor, sin las preocupaciones del trabajo. “ Después de nadar salís renovado”, asegura Alejandro Legasa, rector del Instituto de Natación y Deportes de Buenos Aires.
Según la Organización Mundial de la Salud, se considera que el estrés laboral afecta negativamente a la salud psicológica y física de los trabajadores, además de a la eficacia de las entidades para las que trabajan. Destinar un 70% del horario de almuerzo al deporte y el 30% para ingerir alimentos favorece la salud mental y física de cualquier individuo, aumentando la concentración, productividad y buen humor.
Legasa además asegura que “nadar es uno de los mejores ejercicios, es una actividad que se puede hacer en cualquier momento y a cualquier edad. Con la natación se trabaja todo el cuerpo y cada uno lo hace a su nivel. Es una opción accesible para todos, ideal para burlar a la rutina”.
Fuente: Infonews
Sábado, 4 de abril de 2015
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