Cientos de vecinos pujaron por las 112 motos que remató la Comuna
La gran subasta de motos organizada por la Municipalidad fue un éxito tanto por la cantidad de personas que participaron como por los precios que pagaron los compradores de estas unidades que fueron secuestradas en la vía publica y nunca reclamadas.
Martes, 13 de marzo de 2012
Fue tal el éxito que a los cuatro martilleros no tuvieron que hacer ningún esfuerzo para que los participan hagan ofertas importantes a tal punto que la mayoría delos rodados se remataron en más de 1.400 pesos. Las más codiciadas fueron las motos de marcas reconocidas como Honda o Yamaha, pero unidades de Motomel o Guerrero se cotizaron muy bien pese al estado en el que se encontraban al momento de subastarlas. Fue tal la puja que a poco de arrancar los asistentes ofrecían hasta al triple del valor base fijado en 200 pesos por cada motociclo, incluso una Honda 650 centímetros cúbicos arrancaba con ese precio. Con el correr las de los minutos se fueron subastando todas las unidades permitiendo que a la comuna ingrese una suma cercana a los 160.000. Para los funcionarios comunales fue un éxito rotundo y esperan que las próxima que se realizará en tres meses tenga una convocatoria similar o mayor.
No dio abasto el Domo
Desde horas muy tempranas cientos de personas se agolparon en el Domo del Centenario lugar donde se realizó el remate. En un momento la organización se vio desbordada y debieron abrir más puertas para que ingresen los interesados. Al tratarse de un remate público, las autoridades debieron garantizar a todos los oferentes la posibilidad de hacer una oferta por lo que la logística trabajó arduamente a fin de dar todas las garantías. Además para poder comenzar debieron esperar varios minutos más pero la demora no fue bien recibida por el público que comenzó a reclamar el inicio del acto organizado por la comuna.
Muchas desprolijidades
Muchos de los compradores pensaron que podrían comprar una unidad por no mucho más de la base, pero se equivocaron dado que la oferta fue muy importante y cuando escuchan que alguien estaba dispuesto a pagar más de mil pesos abucheaban. No faltaron aquellos que denunciaron ser víctimas de una estafa por parte la Municipalidad que había ilusionado a todos. En un remate los demás oferentes deben respetar al resto por más que no puedan competir o crean que se está pagando un precio demasiado alto. Tampoco deben tratar de evitar que alguien haga un ofrecimiento. Seguramente en el próximo evento se elija otro lugar más amplio donde se pueda escuchar y ver mejor al público que en este caso llenó uno de los galpones más grandes que posee el domo del centenario.
Las más codiciadas
Todos trataron de quedarse con las mejores unidades en este caso las Honda y Yamaha, en particular una moto de 650 centímetros cúbicos por la que pagaron unos 18.000 pesos, una cifra acorde con la unidad. En tanto, una Dax fue ofertada en más de 3.300 pesos y una Yamaha 110 fue comprada por unos 3.000 pesos. Unidades que para sus respectivos compradores valían el precio a pagar.