Fútbol Desde que volvió, el Apache entregó muy poco juego a la selección
Desde que Carlos Tevez volvió a la Selección convocado por Gerardo Martino no ha resultado ser una solución.
Desde que Carlos Tevez volvió a la Selección convocado por Gerardo Martino -es decir, a partir de los 29 minutos que jugó ante Croacia en Londres, el 12 de noviembre del año pasado- no ha resultado ser una solución. Apenas, si se quiere, queda el último penal de la serie ante Colombia por los cuartos de final de la Copa América de Chile como el pico más alto de productividad.
Estuvo en 13 partidos, es cierto, y jugó poco: 366 minutos. Y en los dos que salió de titular, frente a El Salvador y México en Estados Unidos, poco y nada hizo como para ratificarle su presencia al entrenador. No sólo porque no metió un gol. Tampoco dejó esas actuaciones que benefician al equipo, a sus compañeros, como las que suelen verse en Boca.
El jueves a la noche en el Monumental, en la derrota histórica ante Ecuador, jugó 66 minutos: después de desordenar aún más al equipo, ya con el 0-2, dejó pagando a Frickson Erazo y la tiró por arriba y, en tiempo de descuento, le pegó una patada de atrás a Gabriel Achilier que le valió la amarilla. El jugador que habían pedido gran parte de los hinchas, olvidándose en un abrir y cerrar de ojos de Sergio Agüero, entregó la cuenta en rojo.
La Selección de Martino se apoyará en la figura de Tevez. Al menos el martes ante Paraguay en Asunción, en la segunda fecha de las Eliminatorias. Después, el técnico podrá reordenar la convocatoria, darle más aire a Paulo Dybala, volver a llamar a Gonzalo Higuaín. Pero ahora el Tata tendrá que hacerse cargo: es su carta.
Hasta aquí, se ausentó el Carlitos individualista, atrevido y encarador, y emergió el que baja impaciente porque ve pasar la pelota, el que se tira a los costados del área y libera la zona. Porque, en resumidas cuentas, fue Martino el que lo volvió a meter en la Selección.
El que generó, entonces, que Tevez haya sido el más ovacionado cuando apareció su cara en la pantalla gigante de la cancha de River. Tevez estaba en otra, descollando en la Juventus, soñando con Boca, y recibió el llamado de Martino. Por convicción o por aceptar las recomendaciones. "Hubo presiones externas para que estuviera... Traté de manejarlo hasta lo último pero era difícil y era irme -admitió Sergio Batista dos años después de la Copa América Argentina 2011 en relación a Tevez-. La presión llegó de arriba. Presión de AFA, presión política".
Alejandro Sabella, sucesor del Checho Batista, lo evitó, prescindió de su servicio. Martino, sea por lo que sea, es el responsable del regreso de Tevez a la Selección Argentina.
Fuente: El Gráfico
Sábado, 10 de octubre de 2015
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