Futbol. Italia sigue conmocionada por la muerte de Morosini.  Piermario Morosini, jugador del Livorno falleció de una crisis cardíaca en pleno partido.
La muerte del futbolista italiano Piermario Morosini ha provocado en Italia una discusión sobre si se exige demasiado a los jugadores profesionales con tantos partidos y si es suficiente el cuidado médico que se les da.
“Debemos jugar menos y no tan seguido‘, exigió el delantero estrella del Udinese Antonio di Natale. El dos veces máximo goleador de la Serie A italiana admitió que el año pasado pensó en retirarse debido a la enorme carga. ‘Apenas queda tiempo para la recuperación”, dijo.
“El fútbol es bonito e importante, pero debemos tener en cuenta también nuestra salud”, advirtió el ex internacional de 34 años. Di Natale había jugado en el Udinese con Morosini.
El centrocampista sufrió un paro cardíaco el sábado en el partido de la Serie B entre su nuevo equipo, el Livorno, y el Pescara, y murió a los 25 años. Para hoy está prevista la autopsia para constatar las causas exactas de la muerte.
El alcalde de Pescara, Luigi Albore Mascia, va a presentar un informe sobre la discutida acción de salvamento en el estadio. Un coche de la policia mal aparcado retrasó en tres minutos la llegada de la ambulancia. Pero, según las actuales informaciones, no habría influido en absoluto en las inmediatas medidas de auxilio médico iniciadas en el propio terreno de juego.
El ministro de Deportes de Italia, Piero Gnudi, exigió ya el fin de semana, mejores controles médicos: “Me pregunto si los reconocimientos no deberían ser más profundos y más continuos”, dijo.
Giuseppe Palaia, desde hace años el médico del Lecce, opinó que el cuidado médico en la primera y segunda división era muy bueno. “Pero en categoría juvenil hay grandes vacíos”, advirtió. El seleccionador nacional, Cesare Prandelli, opinó que pese a todas las medidas de prevención, siempre hay un cierto riesgo.
“Gracias a los obligatorios exámenes sobre aptitud deportiva en los últimos 20 años el número de casos de muerte súbita en el deporte en Italia descendió en un 90 por ciento”, tranquilizó el presidente de la Asociación de Médicos Deportivos de Italia, Mauricio Casasco.
El presidente de la Federación Italiana de Fútbol, Giancarlo Abete, hizo hincapié en el hecho de que la organización ha adiestrado ya a 10.000 personas en el manejo de desfibriladores. “Pero queremos hacer aún más en los terrenos de juego”, subrayó Abete, quien después de la muerte de Morosini canceló todos los partidos del fin de semana.
Fuente:Diario Norte
Martes, 17 de abril de 2012
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