Interior La ganadería, aliviada por las lluvias en el centro chaqueño, se prepara para el invierno El centro chaqueño recibió el día de ayer con precipitaciones pluviales que sumaron algunos milímetros más a los acumulados la pasada semana que, si bien no ayudan a salvar la campaña agrícola, son un alivio para el sector ganadero que estaba ingresando a una situación dramática por la falta de agua y pastos.
SAENZ PEÑA (Agencia) “Los campos dónde se hace ganadería hoy están mejor, con verdeo y humedad, y eso nos permite tener esperanzas de que se podrá pasar el invierno sin tantas pérdidas”, decía Mario Fogar, reelecto presidente de la Sociedad Rural de Sáenz Peña.
En buena parte del departamento Comandante Fernández, con excepción del área cercana al Maipú, las lluvias de abril sumaron entre cien y ciento veinte milímetros “lo que permitió recolectar algo de agua en las represas y sembrar pasturas”. El área que se encuentra más aliviada “gracias a la bendición de las lluvias” es la que comprende las chacras ubicadas hacia el sur de la ruta 16, hacia el norte la situación no es tan buena.
“Con el déficit que hay en el perfil sabemos que lo que llovió todavía no soluciona el problema, pero al menos nos devuelve el optimismo ya que todo el verano pasó sin precipitaciones y no nos permitió hacer reserva de alimentos porque todo lo que sobrevivía al calor era para consumo inmediato de los animales”, comentó el ruralista.
No todo es verde
La realidad del departamento Comandante Fernández no es cien por ciento positiva para los pecuarios. La zona norte, en el límite con el Maipú, existen colonias en las que “no cayó una gota”.
“Más al norte de La Matanza, varios son los productores que desde hace meses que no tienen registros de lluvias en sus campos, la situación es realmente problemática para ellos que tienen que acarrear agua y no cuentan con pastos ni reservas”, relató el presidente de la rural de Sáenz Peña. Agregó que “de la ruta al sur la situación de dramática sequía cambio, pero al norte no hubo posibilidad de cosechar agua y los pastos están en pésimas condiciones”.
Siembra de pasturas
La humedad que trajo el mes en curso, tras el extenso período sin lluvias e intenso calor que “dejaron amarillos los pastos”, permitió que los ganaderos de parte del centro chaqueño sembraran en estos días algo de pasturas de invierno, como trébol y alfalfa. “La recuperación del verdeo, la siembra y la promesa de algunos aguaceros más, nos hacen creer que los tres meses de invierno no serán trágicos para el rodeo vacuno”, menciona optimista Fogar.
“Durante la semana se estuvo implantando trébol y alfa que están naciendo muy bien y los chaparrones de las últimas horas ayudarán a su desarrollo, pero lo sembrado es pastura que estará disponible dentro de tres meses que, si las heladas no las afectan, serán para alimento en la salida del invierno; para pasar los meses invernales no nos queda otra que comprar”, advirtió el presidente de la Sociedad Rural.
En el tema agua el problema “está solucionado a medias” porque las represas pudieron recuperar algo del nivel de reserva y en los pozos y perforaciones se registró un aumento del caudal, “al menos en una porción de la zona”.
Compras para pasar el invierno
PAra pasar el invierno los ganaderos están buscando comprar alimento “como algo de maíz de la campaña pasada que todavía se consigue y lo que pueda haber de sorgo”.
“Los productores están llevando mucha semilla de algodón y un poco de fibrilla para tener algo de reserva para los meses que se vienen, especialmente en aquellas zonas en las que no llovió y no hubo rebrote de pastos naturales o implantados, lugares dónde también se está acarreando agua”, refirió Mario Fogar.
Vender para comprar
“El productor está vendiendo terneros para poder comprar el alimento para que el rodeo pase el invierno sin tanto trauma, y la condición corporal no se vea tan disminuída”, explicó el presidente de la Sociedad Rural de Sáenz Peña, que mencionó que los chacareros buscan comercializar parte del stock “para que la fábrica, que son las vacas, lleguen al período estival en buenas condiciones”.
Al respecto, el dirigente señaló que “en la zona se vendieron casi todos los terneros y esa plata se destinó a la compra de alimento y la realización de obras de infraestructura, como perforaciones, para tener agua”. “La idea es salvar las madres y esperar las crías en la primavera; cuándo tenemos incontingencias climáticas adversas, los productores buscamos salvar nuestra fábrica que son los vientres, las hembras”, enfatizó Fogar.
En este contexto, acotó el productor que “los precios a los que se vendieron los terneros no fueron los mejores porque no había compradores y los que había pagaron entre ocho y nueve pesos el kilo”.
Fuente: Diario Norte
Jueves, 26 de abril de 2012
|