Inmigración La Unión Europea se reúne en un nuevo intento por resolver la crisis de refugiados A pedido explícito de los gobiernos de Alemania, Francia y Reino Unido, la UE convocó hoy a una reunión de ministros del Interior para el 14 de septiembre para volver a intentar coordinar una respuesta a la crisis de refugiados africanos y de Medio Oriente.
Poco antes de conocerse el anuncio de la presidencia luxemburguesa de la UE, el papa Francisco había pedido desde el Vaticano a los países de Europa que cooperen entre ellos para evitar "los crímenes de estas masacres que ofenden a la humanidad", según reprodujo la agencia de noticias EFE. Tras el tradicional rezo del Angelus dominical, Francisco recordó "los numerosos migrantes que han perdido la vida en sus terribles viajes" desde África y Medio Oriente hasta Europa y destacó especialmente a "las 71 víctimas, entre ellas cuatro niños, encontradas en un camión en la autopista entre Budapest y Viena" la sCinco presuntos traficantes de personas ya fueron detenidos y Austria anunció hoy nuevas medidas de seguridad para evitar que mafias escondan refugiados en camiones, pero miles de familias siguen llegando a Europa desesperadas en busca de una vida en paz.
La crisis de refugiados actual alcanzó cifras inéditas en Europa este año.
Según la ONU, más de 300.000 personas, la mayoría familias que escapan de guerras, violencia sectaria y religiosa y represión estatal en África y Medio Oriente, llegaron en los primeros ocho meses del año a las costas de Grecia e Italia, tras una peligrosa travesía en el mar Mediterráneo.
Pese a estar viajando en condiciones dramáticas durante meses, una vez que llegan al sur europeo comienzan otro agotador y doloroso viaje hasta los países del norte del continente, como Alemania, Reino Unido y algunas naciones nórdicas, en donde existen más posibilidades laborales para construir un nuevo futuro.emana pasada.Por ejemplo, la Guardia Costera informó hoy que en las últimas horas sus barcos interceptaron y rescataron a más de 700 refugiados e inmigrantes, que fueron transportados a algunas de las islas del país hasta que haya algún buque que los lleve al puerto ateniense de El Pireo.Esta mañana un contingente de cerca de 2500 personas, principalmente refugiados, desembarcaron en ese puerto de la capital griega y la mayoría se fue directamente a la estación principal de trenes para seguir camino a Macedonia, la primera parada en los Balcanes en la ruta hacia el norte europeo.
En Macedonia pueden utilizar el transporte público, pero una vez que llegan a Serbia comienzan las eternas caminatas bajo el calor sofocante del verano del hemisferio norte hasta la frontera con Hungría, otro país miembro de la UE.
El gobierno de Hungría anunció hoy que terminó la construcción de una valla de alambre a lo largo de los 175 kilómetros de frontera que comparte con Serbia, según informó el portal de noticias local Mno.
Mientras esta valla alambrada por ahora no parece poder frenar a los miles de refugiados desesperados que siguen cruzando, arrastrándose y esquivando a los policías, Budapest ya adelantó que antes de fin de año concluirá una segunda valla, más sólida y de cuatro metros de altura, según reprodujo la agencia de noticias DPA.
La otra puerta de entrada al Viejo Continente son las costas de Italia, un país que, como Grecia, intenta dar alguna respuesta a cientos de miles de refugiados mientras no consigue salir de una crisis economía que estrangula a ambas naciones desde hace seis años.
"El tiempo de permanecer callado se acabó. Hay que cambiar el acuerdo de Dublín y tiene que haber una política de refugiados europea con un derecho de asilo europeo", reclamó hoy el primer ministro italiano, Matteo Renzi, en declaraciones al diario local Corriere della Sera.Esta mañana un contingente de cerca de 2500 personas, principalmente refugiados, desembarcaron en ese puerto de la capital griega y la mayoría se fue directamente a la estación principal de trenes para seguir camino a Macedonia, la primera parada en los Balcanes en la ruta hacia el norte europeo.
En Macedonia pueden utilizar el transporte público, pero una vez que llegan a Serbia comienzan las eternas caminatas bajo el calor sofocante del verano del hemisferio norte hasta la frontera con Hungría, otro país miembro de la UE.
El gobierno de Hungría anunció hoy que terminó la construcción de una valla de alambre a lo largo de los 175 kilómetros de frontera que comparte con Serbia, según informó el portal de noticias local Mno.
Mientras esta valla alambrada por ahora no parece poder frenar a los miles de refugiados desesperados que siguen cruzando, arrastrándose y esquivando a los policías, Budapest ya adelantó que antes de fin de año concluirá una segunda valla, más sólida y de cuatro metros de altura, según reprodujo la agencia de noticias DPA.
La otra puerta de entrada al Viejo Continente son las costas de Italia, un país que, como Grecia, intenta dar alguna respuesta a cientos de miles de refugiados mientras no consigue salir de una crisis economía que estrangula a ambas naciones desde hace seis años.
"El tiempo de permanecer callado se acabó. Hay que cambiar el acuerdo de Dublín y tiene que haber una política de refugiados europea con un derecho de asilo europeo", reclamó hoy el primer ministro italiano, Matteo Renzi, en declaraciones al diario local Corriere della Sera.
Fuente: Télam
Domingo, 30 de agosto de 2015
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