Torneo Inicial Con el gol atragantado  Vélez jugó mejor que su rival y tuvo varias chances claras de marcar un gol, pero se volvió de Brasil con un 0-0 que no lo deja conforme frente a un rival débil como lo es Ponte Preta. El partido de vuelta por los cuartos de final se jugará en Liniers el jueves que viene.
Vélez se vuelve de Campinas, esa ciudad brasilera que queda a 90 kilómetors de San Pablo, con el grito de gol atorado en la garganta pero con la sensación de haber dado un paso adelante en la carrera por llegar a las semifinales de la Copa Sudamericana. Con esa impresión ambigua que deja el 0 a 0. Por un lado, es un resultado optimista de cara al futuro fortinero en la competición. Pero también queda el gusto amargo de ese cabezazo que Lucas Pratto impactó en el minuto 45 del segundo tiempo y se fue apenas por encima del travesaño
“La agrarré mal. La quise cambiar de palo porque veía muchos jugadores de Ponte Preta ahí en el arco. Entonces la quise poner arriba y se me levantó demasiado”, contó luego el lungo delantero. Antes de esa de Pratto, también la tuvo el juvenil Ramiro Cáseres. Pero resolvió mal en el mano a mano. Y unos minutos después fue Ariel Cabral quien tuvo la chance de marcar el gol de visitante. Pero falló el zurdazo. Y así, ante la apatía del equipo local, el partido se encaminó hacia el 0 a 0. Ante el modesto Ponte Preta, el Fortín demostró ser más equipo.
Durante los 90 minutos, exhibió muchas más virtudes que este equipo que ocupa el 17mo puesto del Brasileirao y corre serios riesgos de descenso. Pero, al cabo, Vélez saldrá a jugar el jueves que viene en Liniers con la obligación de ganar, porque un empate con goles lo dejaría eliminado por la regla del gol de visitante y otro 0 a 0 lo llevará a los penales. Habrá que ver cómo le cae a los muchachos de Ricardo Gareca esa presión, sin descuidar que enfrente tendrá a un equipo brasilero, con los destellos individuales que llevan en sus pies casi por genética. Ayer, se volvieron de Brasil con un sabor agridulce. “Pudimos hacer un gol. Nos vamos con el sabor amargo. Yo tuve una, Lucas también. No viene nada mal el empate, igual”, analizó Cabral, el volante zurdo que tuvo la manija del partido.
“Tuvimos la iniciativa de ganar. Lo demostramos desde el primer minuto. Tocamos la pelota, tuvimos llegadas. Ahora hay que demostrarlo allá, en casa. Tienen buenos jugadores, puede sorprender en cualquier momento, vamos a tener que salir a jugar muy concentrados”, aseguró. Por momentos, Vélez fue impreciso, sin buena circulación de pelota, aunque hacia el final del partido fue reencontrando un mejor rendimiento. Ponte Preta nunca tuvo intención de tomar la iniciativa, y dejó que los volantes visitantes manejaran el ritmo del partido. “Es un equipo que juega al contraataque. Hoy lo hizo de local, en Argentina va ser igual.
Podríamos haber ganado, pero igual nos vamos conformes”, afirmó Pratto. Sin Mauro Zárate, que se retiró lesionado a los ocho minutos de partidos, Gareca mandó a la cancha al ligerito Cáseres, que estuvo movedizo en el ataque. El chiquitín abrió caminos, aunque estuvo poco certero en el área. Por eso a Vélez le quedó el grito de gol atragantado, aunque se trajo en la valija un empate que a la larga puede ser importante.
Fuente: elgrafico
Viernes, 1 de noviembre de 2013
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