Sextas Extrañas ceremonias "espirituales” que terminan en hechos policiales La brutal tragedia que tuvo lugar en una vivienda de General Pinedo debe disparar el alerta y echar luz sobre este tipo de episodios con aparente origen en cuestiones "espirituales” que transitan muy cerca del límite de lo delictivo hasta que en algún momento caen en él. Según se supo a través de funcionarios policiales y la prensa, durante todo el fin de semana una joven de 22 años fue el epicentro de su familia, cuyos integrantes, al menos algunos de ellos, estaban convencidos de que había sido poseída por el demonio. Fue hallada por transeúntes, aparentemente, enajenada en una plaza y llevada al hospital, de donde fue devuelta a su casa. En el hogar familiar tenían una preocupación: quitarle el demonio, y con ese fin la llevaron a varios templos presuntamente evangelistas, donde se le habría practicado una especie de exorcismo. Sin embargo, el resultado fue infructuoso y por eso su hermana continuó orando por su cuenta hasta que en un momento determinado del último martes escuchó una voz que le confirmaba que un demonio se había apoderado de la jovencita. Por esto, y para liberarla del mal, escuchó que debía arrancarle los ojos. Y eso hizo.
Teniendo en cuenta la brutalidad del acto, resulta improbable que haya sido cometido por una sola persona, en caso de que la víctima estuviera consciente. Por esto, se creen dos hipótesis: que la chica haya estado bajo los efectos de algún tipo de anestésico o que hayan sido varios los actores del macabro ritual.
La víctima fue llevada de urgencia al hospital local, después al 4 de Junio de Presidencia Roque Sáenz Peña y desde ahí derivada al Perrando, de Resistencia, donde se espera su recuperación. Su hermana, señalada como la autora material de este aberrante acto, está presa, la investigación continúa y no se descartan nuevas detenciones en breve, incluso fuera del ámbito familiar.
La escena parece salida de un film de terror, pero se dio en el marco de una familia "normal”, en un vecindario como cualquiera, en un pueblo de los más tranquilos. Podría tratarse de un episodio aislado, de los que quizás no veamos otro en muchísimos años, sin embargo, aunque no se conocen desenlaces tan dramáticos, es vox pópuli la proliferación de un sinfín de cultos que promueven el fanatismo más radical y la devoción extremadamente sumisa a dudosas deidades incluso de carne y hueso, incluso vivas.
Una clara evidencia de prácticas "espirituales” de todo tipo y aparentemente sin control, ni supervisión oficial es la multiplicación de templos "informales”, a veces improvisados en viviendas familiares, pero también los extraños rituales que se practican en descampados y en horarios insólitos, que incluyen muchas veces sacrificios más allá del clásico degüello de gallinas y otros animales de granja de algunas religiones africanistas, muchas de ellas reconocidas y habilitadas.
Definitivamente, es momento de que las autoridades tomen verdaderas cartas en el asunto y se aboquen a la investigación de este tipo de fenómeno que se da en torno a lo cuasi religioso para evitar consecuencias que configuren verdaderos y dramáticos hechos policiales como el que hoy conmueve a toda la provincia.
Fuente: Primera Linea
Jueves, 20 de agosto de 2015
|