Mundo Triste final: tras ser rescatado, murió el niño Rayan, atrapado cinco días al fondo de un pozo El nene, de cinco años, había caído el martes en un pozo de 32 metros de profundidad. Habría fallecido en la ambulancia en que lo trasladaban, tras ser rescatado aún con vida.
El niño Rayan, de cinco años, fue rescatado muerto tras pasar cinco días en el fondo de un pozo de 32 metros, según un comunicado del Gabinete de la Casa real de Marruecos. Fue pasadas las 17:30 de Argentina que el niño fue sacado de la caverna por rescatistas y médicos que habían ingresado en el operativo. Cuatro días, siete horas y 34 minutos fue el tiempo que el pequeño permaneció atrapado en la profundidad.
“Respira con dificultad pero está vivo”. La frase pronunciada por uno de los rescatistas en Marruecos minutos antes de sacar al pequeño Rayan, de cinco años, del pozo de 32 metros de profundidad, que había dado el primer alivio después de cinco días de tensión, hasta que finalmente lograron sacar al chico a la superficie.
La desesperada carrera contrarreloj mantuvo a socorristas marroquíes trabajando desde hace cuatro días, a la familia angustiada, a muchas personas participando en cadenas de oración y a medios de comunicación de todo el mundo transmitiendo en vivo.
Minutos antes del desenlace, la cámara de los rescatistas mostraba que Rayan se movía. “Le hablé de lejos por radio, escuché su respiración, respira con dificultad pero está vivo”, afirmó entonces conmovido un rescatista, según informó la agencia italiana ANSA. Para el rescate, los socorristas descendieron con un equipo de médicos y una camilla.
El procedimiento fue realizado con especial precaución, sobre todo al final, cuando se encontraban a sólo 70 centímetros de Rayan y advirtieron que el suelo estaba “inestable” y que había que realizar maniobras cuidadas para evitar que cayeran piedras y polvo sobre él.
Rayan cayó accidentalmente el martes pasado en un pozo seco, estrecho y de difícil acceso, excavado a proximidad de la casa de su familia, en la aldea de Ighran, cerca de la ciudad de Bab Berred, en la provincia norteña de Chefchauen.
“Conservo la esperanza de que mi hijo saldrá vivo de ese pozo”, había declarado en la noche del viernes el padre de Rayan a un canal marroquí. “Agradezco a todas las personas movilizadas y a aquellas que nos apoyan en Marruecos y otros lugares”, añadió.
El agradecimiento del padre respondió a que mientras trabajaron los rescatistas, miles de personas, algunas originarias de la región, acudieron para mostrar su solidaridad y acamparon allí a pesar del frío glacial de la zona montañosa del Rif, a unos 700 metros de altitud.
“Vinimos a apoyar a los socorristas. Rayan es un niño de nuestra región, rezamos a Dios para que se salve. No nos iremos hasta que salga del pozo”, habían dicho algunos de quienes seguían de cerca las acciones de rescate.
Fuente: CLARIN.COM
Domingo, 6 de febrero de 2022
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